Seguimos con nuestra lista de los mejores jardines para visitar en Navidad. Estos son los cuatro que nos faltaban por comentar, uno de ellos un tanto especial:
Atlanta Botanical Garden
En el Jardín Botánico de Atlanta, en Estados Unidos, encontramos un auténtico mundo de fantasía lumínica. Combinaciones que dan forma a todo tipo de animales o personajes imaginarios, tales como elfos, unicornios… Unas 12 hectáreas de jardín se convierten allí en la atracción principal de la ciudad por Navidad. En el “Night Walk”, un camino inspirado en la pintura de Van Gogh, la iluminación recrea un escenario mágico con multitud de estrellas.
Fotografías: Atlanta Botanical Garden.
Jardín Botanico de New York
El Jardín Botánico de Nueva York fue fundado en 1981. Se encuentra en el barrio del Bronx y es uno de los jardines botánicos más importantes de Estados Unidos. Al llegar la Navidad se instala en él el llamado Holiday Train Show, un mundo a pequeña escala (creado con materiales naturales como cortezas de árboles, musgo, hojas…) surcado por trenes en miniatura. En su pequeño paisaje se reproducen edificios y monumentos de la ciudad.
Fotografías: New York Botanical Garden
Parque estatal Shore Acres, Oregon.
En 1987 nace la tradición de adornar Shore Acres Park de la mano de los habitantes de Coos Bay. Ahora es la Asociación de amigos del parque quien organiza el evento, en el que participan más de 1500 voluntarios. Lo que comenzó siendo una sencilla distribución de luces por el jardín se ha convertido, actualmente, en un acontecimiento multitudinario de gran importancia turística para la ciudad.
Aurora boreal en Tromso, Noruega.
¿Quién dijo que, en Navidad, los jardines sólo pueden ser iluminados con vistosas luces artificiales? Para aquellos con gustos más exigentes en cuanto a originalidad, nada como viajar, por ejemplo, a Tromso y dejarse llevar por un espectáculo de luces celestiales sin necesidad de enchufes. La aurora boreal, sin duda, deja sin palabras a cualquiera que pueda disfrutar de un espectáculo natural de esta magnitud. Así, las montañas y la ciudad forman un gran «jardín», iluminado de la manera más mágica que cabe imaginar…
Jardines para visitar en Navidad (I)