Os ofrecemos una entrevista a Ana Calo, propietaria del jardín de «A casa das camelias«.  Esta charla os ayudará a conocer mucho mejor las características e historia de este jardín de colección.

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Hablemos de un punto de partida, ¿en qué año comenzaste a crear tu jardín? ¿cómo ha sido el proceso de creación?

Comencé a crear mi jardín en el año 1.995, después de que me hago cargo de la casa al morir mi padre ese año. Empiezo sacando los viñedos que existían y los frutales viejos, pues era una finca que se dedicaba a cultivos, y voy incorporando plantas a medida que voy adquiriendo. Hay que recalcar que la finca está como dividida en dos partes: la de arriba y la de abajo, como yo le llamo. Así que comencé por la parte superior hasta que se fue extendiendo a todo. La finca tiene una extensión de unos 12.000 metros cuadrados que limitan con el río Coroño. Con la “segunda parte”, no empecé hasta años más tarde cuando se me quedó corta la primera.

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¿Sigues algún criterio a la hora de plantar? 

Cuando empecé a plantar, el criterio que seguí, fue poner unos leylandii separados para hacer un microclima en el que se pudieran dar variedades de plantas de todos los continentes al abrigo de éstes, pues al lado del río, la temperatura del centro de Boiro a aquí baja unos 3 grados y la humedad es muy alta. No sé si hice bien pero mis estudios de jardinería eran nulos, me movía mi afición, y fui aprendiendo algo más a lo largo de los años de mis errores.

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¿Cuántas especies y variedades contiene en estos momentos tu jardín? ¿Cuál es la más abundante?

Mi jardín contiene alrededor de unas 600 variedades de especies de plantas y árboles diferentes y más de 1.000 camelias, de las cuales tengo más de 500 diferentes. Pero si se contaran todas, junto con las repetidas, paso de las 1.000 plantas (árboles, arbustos, trepadoras….), sin contar las camelias.

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¿A que ejemplar le tienes más cariño? ¿El más antiguo y el más joven? ¿Y el más raro o exótico?

No podría decir a que ejemplar le tengo más cariño porque sería concretar mucho, pero entre ellas estaría la Bahuinia variegata Alba, porque lo conseguí de semillas de una madre que se moría y me dio flor por primera vez el año pasado. El ejemplar más antiguo, podría ser el Lirodendro Tulipifero o Tulipero de Virginia, que dicen que tarda 25 años en dar flor y aquí ya florece. El más joven ejemplar,… compro algo todas las semanas ji,ji… Un sedum que compré este día. El más raro o exótico, hay varios pero uno de ellos podría ser el “Erytrhrina x Bidwillii”.

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5. Centrándonos ahora en la camelia, la gran protagonista de tu jardín ¿de dónde nace tu afición por ellas y cuando comienzas a exponer tus flores?

Mi aficción por las camelias comienza de casualidad. Yo por aquel entonces trabajaba en fuera de casa, en Cee ( A Coruña) y por no variar acudí a un vivero que hay allí, el vivero de mi amigo Rosa, Viveros A Granxa, y Rosa tenía a la venta camelias que yo nunca viera, porque como todos, tenía la típica idea de la camelia blanca, la roja y la rosa normal. Desde ese día empecé a coleccionar y luego un albañil, amigo de casa, me habló de la Exposición Internacional que por aquel entonces se celebraba en Villagarcía en el centro, en un lugar muy pequeño. Allí encontré unos formularios para hacerme socia de la SEC (Sociedad Española de la Camelia). A raíz de esto, comenzé a exponer en exposiciones en el año 2004 en la Coruña, en las fechas de San Valentín.

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A muchas de las personas que asisten por primera vez a una muestra de la camelia, les llama la atención la forma en que están dispuestas las flores… ¿cómo surge esta iniciativa y la forma en que se organiza?

Las camelias al cortarlas como son delicadas para flor cortada hay que colocarlas preferiblemente en esponja humedecida para aguantar su corta caducidad. Cada grupo de flores, generalmente, es de la misma variedad para que se puedan apreciar en conjunto pero cada expositor sigue su criterio de colocación, salvo que se vaya a Concurso y haya que seguir unos criterios establecidos en unas bases. De lo que la gente se “asusta más” por así decirlo, es descubrir la infinidad de variedades y de colores, a veces combinados, que existen en el mundo de la camelias, tanto en la forma de sus flores como en la forma de sus flores.

Sabemos que detrás de cada exposición existe un gran trabajo, ¿puedes hablarnos sobre él?

El trabajo de colocación tiene que gustar como aficionado que se es, pues esto conlleva un trabajo muy grande que no se aprecia. El día anterior a la muestra o el mismo día,si el tiempo que tienes hasta la colocación lo permite, se cortan las flores y se colocan en soportes, (cajas….), hasta el momento que se llevan a la exposición. Para llegar a esto, tienes que ir planta por planta, seleccionando las que no están muy abiertas, las poco oxidadas, etc, y aún de estas, se tirarán muchas que llegarán en mal estado. A todo esto le sumaríamos las inclemencias del tiempo y las horas que tardas en recogerlas, dependiendo de la cantidad que tú pretendas exponer.

El día de la muestra las trasladas en los soportes y las colocas como he dicho siguiendo el criterio adecuado, acompañando a veces la decoración de las mesas que nos ofrecen para su colocación, con otros elementos externos a la camelia.

Por último, para todos aquellos que deseen visitar tu colección, ¿cómo pueden hacerlo?

Todos los que deseen visitar la Finca “A casa das camelias” en Lg. Brazos, 17 – Boiro (A Coruña), tienen que solicitar cita previa en el telf. 670014638 (Ana). Serán atendidos de lunes a domingo, con visitas guiadas que comienzan en horario de invierno (30-10 al 28-02) de 16:00 y en horario de verano (1-03 al 29-10) de 17:00. Duración aproximada de las visitas entre 1 y 1:30 horas. Más información en Facebook Finca “A casa das camelias” o en la Oficina de turismo del Concello de Boiro en el telf. 981842654.

Agradecemos inmensamente a Ana su colaboración y os animamos a visitar este original jardín. Disponéis de más información sobre el mismo en este link.

Imágenes: Finca – A casa das camelias